No todas las formas de vitamina E tienen las mismas acciones beneficiosas

La vitamina E se descubrió en 1922, pero solo en la última década se ha empezado a entender que no era un componente aislado y único. Vitamina E es, de hecho, el nombre de toda una familia que incluye los alfa, beta, gamma y delta tocoferoles, así como los alfa, beta, gamma y delta tocotrienoles. Una gran cantidad de complementos nutricionales contienen esencialmente alfa tocoferol, lo que puede hacer creer que únicamente este es sinónimo de vitamina E. Los estudios recientes demuestran que otros componentes con actividad de vitamina E son igualmente muy importantes para la salud.
Al principio, la vitamina E se identificó como una sustancia vital para la reproducción. En la actualidad, se considera un nutriente esencial, implicado en numerosos sistemas biológicos, incluidos los mecanismos de defensa contra la oxidación, los sistemas cardiovasculares y neuromusculares, así como la regulación del crecimiento celular.

Alfa o gamma tocoferol

Numerosos y amplios estudios han mostrado los efectos beneficiosos de la toma de vitamina E en la reducción de las enfermedades cardiovasculares y la muerte por infarto. Otros estudios no han ofrecido tales resultados. Estas divergencias bien podrían deberse al hecho de que el alfa tocoferol se estudiaba de manera aislada; no se tenía en cuenta al gamma tocoferol y los tocotrienoles.

Esto podría explicar igualmente el motivo por el que la vitamina E, que se encuentra en los alimentos, reduce con mayor eficacia el riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular que los complementos de alfa tocoferol. Los alimentos aportan un espectro más amplio de la familia de la vitamina E.
Además, los estudios indican que las dosis importantes de complementos de alfa tocoferol disminuyen de forma considerable la absorción del gamma tocoferol y los efectos de los tocotrienoles. Un grupo de investigadores observó pues que cuando se administra a voluntarios (de entre 30 y 60 años) 1200 UI de alfa tocoferol sintético a diario durante ocho semanas, el gamma tocoferol plasmático disminuye entre un 30 y un 50% en todos ellos en comparación con los valores del inicio del estudio. Estos resultados resaltan el interés de elegir complementos nutricionales que contengan cantidades equilibradas de diferentes compuestos con actividad vitamínica E.

Un papel determinado en las enfermedades cardiovasculares

Un estudio sueco constató que los pacientes que padecen una enfermedad cardiovascular coronaria tenían unos niveles de gamma tocoferol más bajos que los de las personas con buena salud de la misma edad, mientras que la proporción de alfa respecto a gamma era más elevada.

El consumo¹ alimentario de vitamina E, pero no de los complementos de alfa tocoferol, se ha asociado a una menor mortalidad por ataque cerebral o infarto en una amplia cohorte (cerca de 35 000 personas) de mujeres menopáusicas. Se sabe igualmente que el consumo regular de nueces, especialmente ricas en gamma tocoferol, reduce la mortalidad cardiovascular.
Los estudios en animales también han aportado datos interesantes sobre el probable papel del gamma tocoferol en la protección cardiovascular.

En las ratas, un complemento en gamma tocoferol causa una disminución mayor de la formación de coágulos sanguíneos que el alfa tocoferol. Sin embargo, hay que recordar que un aporte complementario de gamma tocoferol aumenta a la vez los niveles de gamma y de alfa tocoferol. El gamma tocoferol inhibía igualmente con mayor eficacia ex vivo la peroxidación lipídica, la oxidación de las LDL y la generación de peróxido. Además, estimula con más eficacia la expresión y la actividad de la superóxido dismutasa.²
Tanto el alfa como el gamma tocoferol aumentan la producción de óxido nítrico (el óxido nítrico dilata los vasos sanguíneos), lo que incrementa la actividad de la sintasa endotelial del ácido nítrico. Solo el gamma tocoferol estimula la expresión de la proteína de esta enzima indispensable.

Un potente antioxidante

El alfa tocoferol se ha reconocido durante mucho tiempo como un importante antioxidante. La investigación ha demostrado ahora que todo el equipo de la vitamina E es mucho más eficaz. Las diferentes formas de vitamina E tienen efectos complementarios contra los radicales.
En conjunto, pueden combatir un espectro mucho más amplio de radicales libres que el alfa tocoferol solo. En cierta medida, el alfa tocoferol puede inhibir la generación de radicales libres. El gamma tocoferol es capaz de inmovilizar y eliminar radicales libres existentes tan tóxicos como el peróxido de nitrógeno. El gamma tocoferol puede así proteger las células frente a los efectos mutágenos y carcinógenos de moléculas reactivas muy peligrosas.

Un efecto protector contra el cáncer

La eficacia del gamma tocoferol para inhibir el crecimiento de las células cancerosas de la próstata es mucho mayor que la del alfa tocoferol. En un estudio que comparaba los efectos inhibidores del alfa tocoferol sintético y el gamma tocoferol natural sobre el crecimiento de las células cancerosas de la próstata, se demostró que el alfa tocoferol es eficaz en una concentración 1000 veces menor que la del alfa tocoferol sintético³.
En un estudio prospectivo, los hombres que tenían las concentraciones plasmáticas más elevadas de gamma tocoferol tenían, en comparación con aquellos con unas concentraciones más bajas, un quinto del riesgo de tener un cáncer de próstata. Además, el efecto protector del selenio y del alfa tocoferol solo se encontraba en presencia de unas concentraciones elevadas de gamma tocoferol.⁴

Los tocotrienoles

Los tocotrienoles son un grupo de compuestos naturales de vitamina E que presentan unas características biológicas similares a las de sus moléculas hermanas para determinados aspectos y diferentes por otros, los tocoferoles. Los alimentos ricos en tocotrienoles incluyen el arroz, la harina de avena, el aceite de palma y la cebada.

Similitudes y diferencias

La diferencia fundamental en la estructura química de los tocoferoles y los tocotrienoles radica en la disposición de los átomos suplentes unidos a un anillo cromanol y en el hecho de que la larga cadena de hidrocarbonos unida a este anillo esté saturada o insaturada. Los tocoferoles tienen una cadena de hidrocarbonos completamente saturados mientras que los tocotrienoles se caracterizan por una cadena de hidrocarbonos parcialmente insaturados.
Cada tocotrienol tiene un anillo de cromanol idéntico al del tocoferol correspondiente, lo que explica que ambos sean excelentes antioxidantes.
Una gran cantidad de estudios aportaron la prueba de que los tocotrienoles tienen importantes efectos beneficiosos que no tienen las otras formas de vitamina E.

Crecimiento celular y actividad anticancerosa

Los trabajos en laboratorio indican que los tocotrienoles pueden afectar al crecimiento o a la proliferación de ciertos tipos de células cancerosas humanas. Los estudios in vitro y en animales sobre la acción de los tocotrienoles en las células cancerosas demuestran que los tocotrienoles inhiben con mayor eficacia el crecimiento de las células cancerosas que los tocoferoles.
Un estudio⁵ demuestra que en las ratas la administración de un complemento de larga duración con tocotrienoles procedentes de la palma reduce el impacto de los carcinógenos. Tras haber estado expuesto a toxinas hepáticas, un grupo de ratas se alimentó con una alimentación complementada con tocotrienoles mientras que otro grupo de animales recibía una alimentación normal.
Las diez ratas alimentadas con normalidad y expuestas a las toxinas presentaron cáncer de hígado en los nueve meses posteriores al estudio. Por contra, solo diez ratas que tomaron el complemento de tocotrienoles presentaron nódulos cancerosos.
Diferentes estudios in vitro evaluaron así la capacidad de los tocotrienoles de inhibir el crecimiento de células cancerosas humanas de mama. Se han identificado diferentes tipos de células de cáncer de mama según si tenían o no receptores de estrógenos en sus membranas celulares. Los tocotrienoles inhiben el crecimiento de las células cancerosas de mama con y sin receptores de estrógenos.
Las investigaciones también han demostrado un efecto sinérgico de los tocotrienoles y del tamoxifeno, un medicamento antiestrogénico utilizado con frecuencia en el tratamiento del cáncer.

Si los tocotrienoles actúan realmente sobre las células cancerosas a través de una vía inducida por los receptores no estrógenicos como sugieren los resultados de estos estudios, los tocotrienoles podrían revelarse útiles para tratar las células cancerosas de mama resistentes a los fármacos antiestrogénicos.
Un grupo de investigación de la Universidad de Texas, en Austin (EE. UU.), dirigido por la Dra. Kimberley Kline confirma los primeros resultados⁶ obtenidos por un grupo de canadienses que mostraba que los tocotrienoles ralentizan el crecimiento de células humanas de cáncer de mama..⁷
Este estudio mostró que los tocotrienoles y el RRR-delta-tocoferol de origen natural causaban la muerte de las células cancerosas. Los gamma y delta tocotrienoles eran los más eficaces. El grupo del Dr. Najla Guthrie de la Universidad del Oeste de Ontario había demostrado con anterioridad un efecto similar del tocotrienol añadido a una mezcla de tocoferoles, mientras que el alfa tocoferol solo era ineficaz.

También se han estudiado los efectos de los tocotrienoles sobre otros tipos de células cancerosas. Los tocotrienoles y más concretamente los gamma y delta tocotrienoles eran los más eficaces en un grupo de compuestos testados por su capacidad de inhibir el crecimiento de las células de los melanomas cancerosos derivados de ratón.⁸

Tocotrienoles y colesterol

Los tocotrienoles tienen un efecto beneficioso sobre el metabolismo del colesterol que no tienen los tocoferoles. Los estudios sobre un gran número de tipos de cultivos celulares mostraron que los tocotrienoles, y en particular el gamma tocotrienol, inhiben la producción de colesterol. Parecen actuar sobre una enzima específica denominada la 3-hidroxi-3-metilglutaril-coenzima A reductasa (HMG-CoA) implicada en la producción de colesterol en el hígado.⁹ Los tocotrienoles inhiben la producción de esta enzima, lo que tiene como resultado una menor producción de colesterol por el hígado. Esto puede conducir a una reducción de la concentración de colesterol plasmático. Los investigadores estudiaron los efectos de una preparación rica en tocotrienoles sobre la concentración de colesterol en el ser humano.

Constataron que en las personas con unas concentración elevadas de colesterol, los tocotrienoles los reducían de forma importante.¹⁰ En un estudio cruzado doble ciego realizado en 25 pacientes con una concentración elevada de lípidos séricos, la administración de cuatro cápsulas diarias de 50 mg de tocotrienoles combinados con aceite de palma causaba una disminución significativa de la concentración de colesterol total y del colesterol de las LDL (un 15 y un 8% respectivamente) al cabo de 8 semanas de tratamiento. No se observó ningún cambio en el grupo de control que recibía el aceite de maíz.¹¹

Beneficios para la salud cardiovascular

Uno de los descubrimientos más interesantes es sin duda el de la capacidad de los tocotrienoles de limpiar los bloqueos ateroescleróticos (estenosis) de la arteria carótida, lo que ofrece la posibilidad de reducir de forma importante el riesgo de ataque.

Los datos más importantes proceden de un estudio¹² clínico realizado para probar el efecto de los tocotrienoles sobre la ateroesclerosis de la carótida. En este estudio que duró 18 meses, cincuenta pacientes con estenosis de la arteria carótida recibieron a diario de forma aleatoria 160 mg de tocotrienoles de palma (formas ala y gamma) con 64 mg de alfa tocoferol de aceite de palma o aceite de palma solo como placebo.
Al cabo de seis meses, las dosis del grupo que recibió el complemento se aumentaron a 240 mg de tocotrienoles y 96 mg de alfa tocoferol.
Al final del estudio, la exploración de las arterias mediante ecografía mostró que el estado de los pacientes del grupo de control no había mejorado en ningún caso y que la estenosis se había agravado en diez de ellos. Por el contrario, en el grupo que recibió el complemento con tocotrienoles, la ateroesclerosis había disminuido y el flujo sanguíneo hacia el cerebro había mejorado en 7 de los 25 pacientes, mientras que la estenosis solo se había agravado en dos de ellos.

Otro estudio¹³ confirma estos resultados. Un estudio de cinco años de duración siguió a 50 pacientes con estenosis de la arteria carótida. Los pacientes tenían entre 49 y 83 años. El estrechamiento de la arteria carótida superaba el 49% en casi la mitad de ellos.
Un grupo de pacientes recibió aproximadamente 650 miligramos de tocotrienoles y alfa tocoferol mientras que el otro tomaba placebo. Se examinó a todos los pacientes cada seis meses durante el primer año y, a continuación, todos los años.
Se realizaron mediciones ecográficas para evaluar el estrechamiento de la arteria carótida tras cuatro años de tratamiento. En el grupo de placebo, la estenosis se agravó en 15 pacientes, se mantuvo estable en 8 de ellos y mejoró ligeramente en dos. En el grupo que recibió el complemento, la estenosis se agravó levemente en 3 pacientes, se mantuvo estable en 12 de ellos y mejoró en 10.

Trabajos experimentales recientes confirman la existencia de una conexión entre la reducción de las lesiones oxidativas y la ampliación de la duración de la vida. El centro de investigación sobre las ciencias de la vida de Japón seleccionó tocotrienoles procedentes de palma para llevar a cabo un estudio sobre el proceso de envejecimiento. Los trabajos se realizaron en nematodos (Caernorhabditis elegans), un modelo de organismo habitualmente utilizado en la investigación contra el envejecimiento. El estudio demostró que los tocotrienoles, pero no el alfa tocoferol, aumentaban la duración de la vida media de este organismo.

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1 Dietary antioxidants vitamins and death from coronary heart disease in postmenopausal women. Kushi LH et al., New Engl J Medicine, 1996 ; 334 : 1156-62.
2 Differential effects of alpha and gamma tocopherol on low-density lipoprotein oxidation, superoxide dismutase activity and nitric oxide synthase activity and protein expression in rats. Ksaldeen T et
al. J Am Coll Cardiol 1999; 34:1208-15.
3 Vitamin E, alpha and gamma tocopherol and prostate cancer. Moyad MA et al. Semin Urol Oncol 1999 May ; 17(é) :85-90.
4 Association between alpha tocopherol, gamma tocopherol, selenium and subsequent prostate
cancer. Helzlsouer KJ. J Natl Cancer Institute 2000; 92: 2018-23.
5 Long-term administration of tocotrienols and tumour-marker enzyme activities during
hepatocarcinogenesis in rats. Rahmat A. et al. Nutrition, 1993 May-June ;9 (3) :229-32.
6 Yu W. et al., " Induction of apoptosis in human breast cancer cells by tocopherols and tocotrienols.3 Nutr Canc 1999 ;33: 26-32.
7 Nesaretnam K. et al., Tocotrienols inhibit the growth of human breast cells irrespective of estrogens receptor status.3 Lipids 1998;33: 461-469.
8 He L ; et al., "isoprenoids suppress the growth of murine B16 melanomas in vitro and in vivo. ",
1997 127:668.
9 Khor HT., et al., “Tocotrienols inhibit liver HMG-CoA reductase activity in the guinea pig.”
Nutr Res 1995; 15:537-544.
10 Qureshi AA et al., " response of hypercholesterolemic subjects to administration of tocotrienols, 1995, Lipids, 30 : 1171.
11 Lowering of serum cholesterol in hypercholesterolemic humans by tocotrienols. Qureshi AA et al. Am J Clin Nutr 1991 Ap ;53(4suppl) :1021S-1026S.
12 Antioxidant effect of tocotrienols in patients with hyperlipidemia and carotid stenosis.
Tomeo AC et al., Lipids 1995 Dec 30(12) :1179-83.
13 Tocotrienols : biological and health effects. In antioxidant status, diet, Watkins TR et al. Nutrition and Health. Papas AM editor, CRC Press, Boca Raton, 1998; 479-496