Cada vez más de ustedes comparten con nosotros sus testimonios sobre la berberina, una sustancia extraída del agracejo (Berveris vulgaris) que hace milagros para disminuir la glucemia y el nivel de colesterol en sangre. No nos hemos resistido a las ganas de publicar uno de estos testimonios, enviado por Marie, una persona diabética de 54 años, que habla de las consecuencias de su cura de berberina y que hace una pregunta muy interesante: en el fondo, ¿por qué funciona la berberina?
Testimonio de Marie :
“Me diagnosticaron una diabetes tipo 2, hace varios meses. Inmediatamente, mi médico me recetó metformina (un medicamento comercializado con los nombres de Glucophage, Stagid y sus genéricos. Nota de la redacción), pero mi organismo reaccionó muy mal al tratamiento: tuve una acidosis láctica grave y tuve que ir a l hospital. Sólo tengo un riñón que funciona bien y ciertos tratamientos medicamentosos no están adaptados a mi situación.
Mi médico me habló entonces de un compuesto de origen natural, la berberina, que parece ser que es uno de los mejores remedios de la medicina tradicional china. Al principio, no estaba especialmente entusiasmada, pero al investigar, descubrí que había muchos estudios que muestran que la berberina, tomada como complemento, era como mínimo tan eficaz como la metformina. Por tanto, pedí 3 botes de berberina del laboratorio Supersmart (el premier sitio que encontré, pero las opiniones de los clientes eran muy elogiosas). No perdía gran cosa con probar. Y, además, como los diabéticos hacen chequeos periódicos, era fácil verificar si funciona o no . Si funciona, mi marido no me puede decir que me lo imagino: los análisis hablan por sí solos.
Por tanto, de acuerdo con mi médico, me hice un chequeo 6 semanas después de la introducción de mi nuevo tratamiento. Y para mi gran sorpresa, mi glucemia aleatoria pasó de 270-310 mg/dl a 170-190 mg/dl. 6 semanas más tarde hice la misma constatación y la de signos evidentes de una mejora de mi salud: menos fatiga, menos despertares nocturnos par beber o ir al baño, más motivación. Hoy en día, la cura de 3 meses que había planificado ha terminado, pero he decidido continuar tomando berberina diariamente, con el permiso de mi médico, y se lo agradezco a ustedes desde el fondo de mi corazón. Lo único que siento es que mi médico no haya podido explicarme claramente cuáles son los mecanismos de acción de esta sustancia natural. Y no encuentro nada claro en los sitios que consulto… Por tanto, mi pregunta es la siguiente: ¿por qué funciona la berberina?”
Antes de responder a la pregunta, detengámonos en esta observación de Marie: “ descubrí que había muchos estudios que muestran que la berberina, tomada como complemento, es como mínimo tan eficaz como la metformina. ” Lo que dice es totalmente exacto.
Un metaanálisis muy reciente (1), es decir una revisión sistemática que reagrupa a todos los estudios serios publicados sobre el tema, llegó a la conclusión en febrero de 2015 de la eficacia de la berberina para “mejor la diabetes tipo 2”, “mejorar la hiperlipidemia” y “reducir la hipertensión”, ¡sin tener el mínimo efecto secundario! Esa revisión se apoya en 27 ensayos clínicos, es decir experimentos realizados directamente con personas. Un metaanálisis más antiguo (2), publicado en 2012, había mostrado también que la berberina tiene “efectos beneficiosos comparables a los medicamentos hipoglucémicos sin sus efectos secundarios ”.
Sin embargo, estas conclusiones no son más que “redescubrimientos”. La berberina es conocida desde hace mucho tiempo por los adeptos de la medicina tradicional china. Allí, se sabe desde hace más de 3.000 años que ésta es muy eficaz para “purificar la sangre” y “prevenir las enfermedades del corazón”.
Vamos ahora a la cuestión de los mecanismos de acción de la berberina. ¬¬
Si el médico de Marie no ha podido explicar claramente “por qué funciona”, no es porque sea incompetente. En su defensa, los mecanismos de acción de la berberina han permanecido en el misterio mucho tiempo. Se veía que funcionaba, pero no se sabía explicarlo racionalmente. Ha habido que esperar a los 10 últimos años para comprender mejor los fenómenos en juego, pero incluso entonces, los mecanismos son tan complejos que no es tan sencillo vulgarizarlos fácilmente al gran público.
A menudo se cree que hay un exceso de azúcar en la sangre de las personas diabéticas porque las células no responden bien a la insulina y que éstas no logran utilizar correctamente esta reserva de energía. En realidad, este fenómeno sólo explica una parte del problema. Las personas diabéticas tienen niveles de azúcar en sangre elevados incluso cuando están en ayuno. Este exceso de azúcar no proviene de la alimentación (ya que están en ayuno) sino de su propia producción de azúcar a partir de grasas y de músculos (que se denomina “neoglucogénesis”).
Para simplificar, imagínese una bañera medio llena, con un grifo clásico que hace elevar el nivel de agua, un tapón que permite evitar las fugas, y una ducha que está colocada dentro de la bañera.
El nivel de agua representa la glucemia: debe ser siempre estable, estar suficientemente elevado para que la bañera no se vacíe, suficientemente bajo para eliminar el riesgo de desbordamiento.
El grifo representa el aporte de azúcar de la alimentación: solo se abre cuando nos alimentamos. Cuanto más rica es la comida en azúcar, más importante es el chorro del grifo.
El tapón situado al fondo de la bañera permite mantener la misma cantidad de agua en la bañera: cuando el grifo está abierto, el tapón se levanta un poco para hacer evacuar el exceso de agua. En el organismo, es la insulina la que favorece la buena utilización de este tapón. Ésta facilita la entrada de azúcar excedentario en las células vecinas que podrán convertirlo en energía o almacenarlo para utilizarlo cuando éstas lo necesiten.
Así pues, cuando una persona sana come, el grifo está abierto y, a la vez, el tapón de la bañera se levanta para hacer evacuar el exceso de azúcar.
En cambio, en las personas diabéticas, este tapón no se abre bien. Por eso, si el grifo corre demasiado tiempo o demasiado intensamente (alto consumo de azúcar), la bañera tiene dificultades para guardar una cantidad de agua estable y el nivel de agua baja peligrosamente. ¡Pero ése no es el único problema! Las personas diabéticas también tienen problemas con su “ducha” …
Una persona sana que lleva cierto tiempo sin comer (por ejemplo, después de un buen descanso nocturno), el nivel de agua de la bañera tiene tendencia a disminuir porque siempre hay fugas y las células tienen necesidades continuas de azúcar. Para remediar este problema, el organismo fabrica azúcar a partir de proteínas que ha digerido o que puede encontrar en los músculos, pero también a partir de las grasas que éste ha almacenado antes. ¡Y éste la reinyecta a la bañera! La ducha se pone en marcha y el nivel de la bañera sube ligeramente hasta su límite óptimo después del cual la ducha se para.
En las personas diabéticas, la ducha no se para nunca: está permanentemente abierta. ¡Ésa es la razón que explica por qué, al despertarse éstas, el nivel de la bañera es demasiado elevado incluso cuando no han abierto el grifo desde hace más de 10 horas!
Este problema de bañera siempre llena plantea problemas a corto plazo para las personas diabéticas (el riesgo de desbordamiento puede traducirse en enfermedades, episodios de hiperglucemia) pero también a largo plazo, ya que la bañera no ha sido construida para soportar un peso de agua tan elevado (los nervios y los vasos sanguíneos que se degradan poco a poco son la causa de enfermedades muy numerosas).
¿Y dónde está la berberina en todo esto? La berberina actúa a 3 niveles en esta situación.
Esta secreción de insulina suplementaria contribuirá a hacer entrar más fácilmente el exceso de azúcar en las células, y por tanto a disminuir el “nivel de la bañera”. Pero la insulina no sirve solamente para eso ésta contribuye a inhibir todo un conjunto de procesos metabólicos que agravan la diabetes tipo 2 y la insulinorresistencia...
En un estudio pionero publicado en 2006, el profesor Jiming ya había evidenciado este primer mecanismo de acción (4) “los estudios realizados con animales y personas que padecían diabetes muestran que la berberina activa una enzima presente en los músculos y el hígado. Esta enzima está directamente implicada en la mejora de la sensibilidad de los tejidos a la insulina – la hormona que contribuye a disminuir la glucemia. ”
En términos científicos, se dice que ésta estimula la glucólisis, un proceso de degradación de la glucosa para producir energía. Al mejorar la utilización del azúcar por las células, ésta permite acelerar la degradación del azúcar y por tanto descargar más rápidamente los vasos sanguíneos.
En realidad, ésta ralentiza la síntesis de la glucosa en el hígado a partir de compuestos no glucídicos (lo que se denomina neoglucogénesis y que es muy problemática en las personas diabéticas) (7).
Si usted desea entrar en los detalles de cada uno de estos mecanismos, puede consultar . Este estudio trata sobre los mecanismos contra la diabetes de la berberina (8) (en inglés).
Mientras tanto, el resultado de estos 3 mecanismos es implacable: el nivel de la bañera disminuye, y esto se traduce inevitablemente en los análisis de las personas diabéticas .
Cuando consultamos las opiniones de los clientes que utilizan esta berberina, nos sentimos inmediatamente emocionados por la fascinación y el entusiasmo que suscita. Para muchos de ellos, los resultados positivos han sido probados por sus análisis (disminución de los niveles de colesterol, de triglicéridos y de azúcar en sangre) y algunos de ellos mencionan incluso el contraste con la eficacia de otros complementos de berberina que habían probado antes.
En realidad, lo que supone la diferencia con los demás complementos, es su pureza: el extracto de Berberis vulgaris aquí se ha estandarizado a un 97 % de berberina, el máximo que se puede encontrar en el mercado. Por otra parte, su dosificación (2 cápsulas de 500 mg al día antes de cada comida) corresponde a la utilizada en la mayoría de los estudios clínicos.
Origen natural, validación clínica y empírica de varios milenios, testimonios elogiosos: si usted no ha probado todavía esta rara joya, es seguramente porque usted no tiene problemas de diabetes o de colesterol. Sin embargo, debe saber que ésta actúa también sobre otras dos plagas que contribuyen a las enfermedades modernas: la inflamación y el estrés oxidativo.
Referencias
Berberina: extracto puro a un 97 % para la salud cardiovascular (procedente del agracejo)
www.supersmart.comGratis
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