
El próximo 15 de diciembre se celebra el día internacional del té, la segunda bebida más consumida del mundo. Una conquista increíble desde su integración en la medicina china tradicional, varios siglos antes de nuestra era, hasta su inmenso éxito comercial en los albores del colonialismo. Hoy en día, es más popular que el café y se multiplican los estudios científicos para confirmar lo que sus usuarios siempre han sabido: es un
relajante imbatible .
Sin embargo, es imposible recomendar a las personas estresadas y angustiadas beber té en grandes cantidades. La razón es sencilla: las hojas de té contienen
cafeína , que a veces se denomina teína, mientras que se trata de la misma molécula que se encuentra abundantemente en el café. ¿Cómo puede ser una bebida relajante y energizante a la vez? Esa es la paradoja del té que, además de cafeína, también contiene
catequinas (siendo la EGCG – galato de epigalocatequina - la principal), que son potentes antioxidantes, y teanina, el ingrediente activo responsable de los efectos relajantes en el sistema nervioso
1-3.
¿De dónde viene el efecto relajante de la teanina?
Cuando una persona bebe una taza de té, las moléculas de L-teanina son rápidamente absorbidas en las microvellosidades intestinales y después transportadas hasta la barrera hematoencefálica que éstas atraviesan para llegar a los tejidos cerebrales. Éstas entonces actuarán de dos maneras muy diferentes. En primer lugar,
activarán la producción de ondas alfa en el cerebro, provocando el mismo tipo de relajación profunda que la meditación. A continuación, influirán positivamente en la producción de varios neurotransmisores como el GABA (ácido gamma aminobutírico), la dopamina y la serotonina, implicadas en las respuestas del organismo a un acontecimiento estresante. Éstos son los dos mecanismos que explican los efectos relajantes de la teanina. Pueden traducirse en una sensación de bienestar, una disminución de la tensión arterial (es decir el efecto contrario de la cafeína) y una disminución de los niveles de cortisol, la hormona implicada en los estados de estrés crónico.
Así pues, para sacar realmente provecho de los efectos relajantes del té, algunas personas ya no dudan en recurrir a esta molécula que hoy en día se logra
extraer naturalmente y concentrar en complementos como la
Sunthéanine (sunteanina). La tentación es todavía mayor si se tiene en cuenta que los tratamientos ansiolíticos medicamentosos son desacreditados en todos los círculos y que un estudio realizado por la asociación 60 Millions de consommateurs – 60 Millones de consumadores, ha revelado el pasado noviembre que de 16 tés negros y 10 tés verdes probados, todos contenían pesticidas, llegando incluso hasta 17 pesticidas por bolsita en algunos casos. Unas cantidades que posiblemente se explican por el cultivo intensivo del árbol del té y el hecho de que las hojas no se laven después de la cosecha para preservar su sabor.
¿Qué hay de las catequinas?
Las personas que deseen beneficiarse específicamente de las catequinas del té también pueden hacerlo gracias al complemento
Sunphenon®. Éste no va destinado a las personas ansiosas, sino a todos los que deseen mejorar su salud en general. Las catequinas del té, y sobre todo las contenidas en el té verde que está menos oxidado, son a la vez inflamatorias, antiartríticas, anticancerígenas, antibacterianas, antifúngicas, antivirales, hipocolesterolemiantes e hipolipidémicas. Unos beneficios innumerables que explican sin ninguna duda el éxito increíble del té en todo el mundo…
Referencias
1. Gray MA, Oliver C, Liley DT, Harrison BJ, Bartholomeusz CF, Phan KL, Nathan PJ. The acute effects of L-theanine in comparison with alprazolam on anticipatory anxiety in humans. LHum Psychopharmacol. 2004 Oct;19(7):457-65.
2. Nobre AC, Rao A, Owen GN. L-theanine, a natural constituent in tea, and its effect on mental state. Asia Pac J Clin Nutr. 2008;17 Suppl 1:167-8.
3. Kimura K, Ozeki M, Juneja LR, Ohira H. L-Theanine reduces psychological and physiological stress responses. Biol Psychol. 2007 Jan;74(1):39-45.