Los mayores toman hasta 14 medicamentos al día, de los cuales algunos no sirven para nada

Estos medicamentos son ampliamente recetados y hay que huir de ellos como la peste Cerca de 150. 000 franceses mayores de 65 años al parecer toma como media 14 medicamentos al día . Esa es la conclusión de un estudio asombroso realizado por la OpenHealth Company que se esfuerza en resaltar las aberraciones de la medicina convencional.
Según el Institut national de la consommation (INC), el Instituto Nacional del Consumo de Francia, este sorprendente consumo excesivo está directamente relacionado con 130.000 hospitalizaciones y 7.500 fallecimientos que se producen cada año como media entre las personas mayores de 65 años, a consecuencia de caídas, de errores en las dosis y de otros accidentes graves.

¿Pero cómo explicar que los médicos se dejen llevar hacia tales arsenales químicos? A priori, muchos no logran suprimir medicamentos recetados inicialmente a título preventivo y añaden nuevos tratamientos durante el curso de los problemas que van surgiendo con la edad. Al cabo de varios años, las personas deben entonces hacer malabarismos con las cápsulas que tienen que tomar, los comprimidos que tienen que chupar y los sobres que tienen que disolver, lo que forzosamente lleva a errores. En Estados Unidos, según US National Poison Data System (Sistema Nacional de Datos sobre Intoxicaciones de EE.UU.), al parecer, cerca de 500.000 estadounidenses han fallecido en 2015 como consecuencia de la ingesta de un medicamento recetado por un médico, 275.000 de los cuales han sido como consecuencia de un error del paciente y 40.000 atribuidos a los estrictos efectos secundarios de los medicamentos.

Lo más grave de todo esto, es que entre este ejército de medicamentos, hay muchos de ellos que no sirven para nada o casi para nada . En febrero de 2017, la revista médica independiente Prescrire desvelaba una lista de estos medicamentos “más peligrosos que útiles”, establecida a partir de las últimas revisiones científicas ¹. Cerca de 91 medicamentos, de los cuales figuran 82 que se venden en Francia, relacionados especialmente con el tratamiento y la prevención del cáncer, de la diabetes, de la artrosis, de las alergias, de la enfermedad de Alzheimer y de muchas otras. Ya hace varios años que los profesores Philippe Even y Bernard Debré, autores de un libro titulado “Guide des 4 000 médicaments utiles, inutiles ou dangereux “ (Guía de los 4.000 medicamentos útiles, inútiles o peligrosos), lo repiten: según ellos, hay una tercera parte de los medicamentos que son inútiles pero que siguen recetándose, debido a unos malos hábitos de los médicos, a la inercia de las agencias del medicamento y al peso de los lobbies farmacéuticos.

E incluso entre los medicamentos que son útiles, se encuentran demasiados que podrían ser reemplazados sin perder en eficacia por alternativas más suaves , con menos efectos secundarios, y que tratan más el núcleo del problema que los síntomas. Por tanto, he aquí los 5 ámbitos más afectados por la polimedicación y las alternativas posibles que hay que considerar con el médico.

Artrosis. Es una epidemia que afecta a millones de personas y que conlleva la prescripción masiva de analgésicos y de antiinflamatorios, medicamentos que tienden más bien a acelerar el avance de la enfermedad. Sin embargo, según un estudio publicado recientemente, la condroitina, un complemento natural, al parecer es también tan eficaz para aliviar el dolor como los AINE (antiinflamatorios no esteroideos), ralentizando a la vez la degeneración de los tejidos articulares ². Se trata de uno de muchos medios naturales con la capsaicina, la glucosamina y la SAMe (S adenosil metionina) , y evidentemente la actividad física, que son reconocidas como eficaces contra la artrosis pero desgraciadamente infrautilizadas.

Trastornos cardiovasculares. ¡Unos investigadores británicos acaban de demostrar que las personas que reciben betabloqueantes tras una crisis cardiaca (lo que pasa en el 95 % de los casos) no sacan ningún beneficio de ello ³! Los niveles de fallecimientos constatados al cabo de 1 mes, 6 meses y más allá, son sensiblemente los mismos que los de las personas que no han sido tratadas con esos mismos medicamentos. Sin embargo, no se puede decir que éstos estén exentos de efectos secundarios: frecuentemente se informa de la existencia de mareos, pulsaciones cardiacas lentas, cansancio y enfriamiento de las manos y de los pies.
Por otra parte, se sigue señalando a las estatinas. Éstas, objetos de una intensa controversia desde hace varios años, son el centro de una nueva sospecha: unos investigadores han descubierto que éstas al parecer aumentan de un 44 a un 61 % el riesgo de diabetes de tipo 2⁴, una enfermedad que por sí misma multiplica los riesgos de enfermedades cardiovasculares a largo plazo… Triste paradoja.
Sin embargo, ¡se sabe que las mejores intervenciones para prevenir los problemas de corazón están relacionadas con el control de peso y del estrés, con el sueño y con la nutrición! Se recomienda en particular el consumo de ácidos grasos omega 3^5-6 (presentes en abundancia en el pescado graso o en los complementos naturales como Super DHA (ácido docosahexaenoico)) y de antioxidantes (en abundancia en las frutas y verduras frescas, o en fórmulas muy estudiadas como Cardio-Clear™ o Cardio Booster).

Sueño. Cuando se envejece, se duerme menos bien, eso es muy conocido, pero es difícil de aceptar. Entonces, al envejecer, cada vez más personas se abandonan a este “método fácil” que son los somníferos y las benzodiacepinas. Algunas personas desarrollan entonces una dependencia física, mientras que otras se acostumbran a tomarlos psicológicamente y acaban por pensar que ya no son capaces de dormir sin ellos… Sin embargo, la instauración de nuevos hábitos de sueño asociada a productos naturales como el GABA, el 5-htp, el kava y la valeriana o actividades físicas como el tai chi⁷ son no sólo posibles sino también mucho mejores para la salud!

Corticosteroides. Es probable que usted ya haya tomado corticosteroides, estos medicamentos antiinflamatorios prescritos por los médicos para un amplio espectro de enfermedades como el eczema, el asma o la artritis. Un estudio demuestra que además de actuar únicamente sobre los síntomas de las enfermedades y no sobre los factores causantes de las mismas, éstos provocan efectos secundarios importantes como la multiplicación de riesgos de fractura, de septicemia e incluso de fallecimiento ⁸. Sin embargo, la naturaleza nos ofrece alternativas antiinflamatorias potentes, especialmente en el jengibre y el cúrcuma, los dos disponibles en extractos concentrados: Super Gingerols et Super Curcuma.

Antibióticos. Es difícil terminar este artículo sin hablar de los antibióticos. Mientras que los hospitales luchan a duras penas contra las antibiorresistencias, un estudio revela que las personas hospitalizadas reciben antibióticos demasiado sistemáticamente: al parecer, en el 20 % de los casos, los tratamientos son clínicamente inútiles y tienen efectos secundarios digestivos, renales y en la sangre ⁹.

Ya es hora de decir basta a este consumo excesivo de medicamentos actuando sobre las causas de las enfermedades y no sobre sus síntomas. La prevención natural debe preferirse a los tratamientos con medicamentos masivos y dudosos, pero todavía queda mucho camino por recorrer: la parte de los gastos de salud dedicados a la prevención no representa hoy más que apenas un 6 %... La buena noticia es que cada uno tiene los medios de invertir la tendencia. Al apostar hoy por la prevención natural, se disminuye automáticamente el riesgo de enfermedades de mañana, y se contribuye a desalojar al medicamento de su pedestal.

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1- Pour mieux soigner, des médicaments à écarter : bilan 2017" Rev Prescrire 2017 ; 37 (400) : 137-148. (pdf, accès libre) 2- Reginster J, Dudler J, Blicharski T, et al. Pharmaceutical-grade Chondroitin sulfate is as effective as celecoxib and superior to placebo in symptomatic knee osteoarthritis: the ChONdroitin versus CElecoxib versus Placebo Trial (CONCEPT) Annals of the Rheumatic Diseases Published Online First: 22 May 2017. doi: 10.1136/annrheumdis-2016-210860 3-Tatendashe B., Marlous Hall et al. β-Blockers and Mortality After Acute Myocardial Infarction in Patients Without Heart Failure or Ventricular Dysfunction, Journal of the American College of Cardiology May 29 2017 DOI: 10.1016/j.jacc.2017.03.578 4- Casula M et al. Statin Use and Risk of New-Onset Diabetes: A Meta-Analysis of Observational Studies, Nutrition, metabolism, and cardiovascular diseases: NMCD 27(5) · March 2017 DOI: 10.1016/j.numecd.2017.03.001 5- Fish oil for primary and secondary prevention of coronary heart disease. Roth EM, Harris WS. Curr Atheroscler Rep. 2010 Jan;12(1):66-72. Review. 6- Omega-3 dietary supplements and the risk of cardiovascular events: a systematic review. Marik PE, Varon J. Clin Cardiol. 2009 Jul;32(7):365-72. Review. 7- Irwin M, Olmstead R et al. Tai Chi Chih Compared With Cognitive Behavioral Therapy for the Treatment of Insomnia in Survivors of Breast Cancer: A Randomized, Partially Blinded, Noninferiority Trial. J Clin Oncol. 2017 Aug 10;35(23):2656-2665. doi: 10.1200/JCO.2016.71.0285. Epub 2017 May 10. 8- Waljee Akbar K, Rogers Mary A M, Lin Paul, Singal Amit G, Stein Joshua D, Marks Rory M et al. Short term use of oral corticosteroids and related harms among adults in the United States: population based cohort study BMJ 2017; 357 :j1415 9- Pranita D. Tamma, Edina Avdic, David X. Li. Association of Adverse Events With Antibiotic Use in Hospitalized Patients. JAMA Internal Medicine, doi:10.1001/jamainternmed.2017.1938