"El kudzu funciona mejor que un parche"

El kudzu es una planta curiosa originaria de Extremo Oriente. Se utiliza desde hace miles de años en la medicina china para curar las adicciones, la migraña, la diarrea, los vómitos, la hipertensión, los acúfenos, etc. En la actualidad, el kudzu se utiliza principalmente para ayudar a pasar de las «drogas» del día a día: alcohol, tabaco, azúcar, etc.

Kudzilla: «La viña que devoró el sur»

Al principio el kudzu se encontraba en China, Japón, Corea, Taiwán, Filipinas, Vietnam, Malasia, Indonesia y Nueva Caledonia [1]. Después, a partir del siglo XIX, el kudzu se introdujo en Estados Unidos.

En 1876, durante el centenario de la creación de los Estados Unidos, el pabellón japonés en Filadelfia consistía en un magnífico jardín exótico. A los estadounidenses les conquistó el kudzu de perfume azucarado y hojas grandes y carnosas [2]. Inmediatamente, los jardineros estadounidenses empezaron a utilizarlo como planta ornamental.

Más tarde, durante la Gran Depresión de los años 30, la Oficina Federal de Conservación del Suelo ordenó plantar kudzu de forma masiva para evitar la erosión de los suelos. En el marco del programa de recuperación económica, se ofrecían salarios tentadores a los jóvenes parados que fueran a plantar kudzu por todo el sur de los Estados Unidos, en particular a Georgia.

El kudzu es una viña rastrera enormemente vivaz. Puede crecer 300 metros al año. Resultó ser la peor de las malas hierbas. Ya no había manera de detener su avance. El clima de la zona es ideal para el kudzu, hasta tal punto que puede crecer a un ritmo de 1,50 m al día.

Desafortunadamente los insectos predadores del kudzu no se importaron desde Asia. Ninguna especie podía poner trabas al desarrollo del kudzu en Estados Unidos. Resultado: los campos desaparecían, los bosques se asfixiaban, los postes eléctricos se veían asaltados, las carreteras quedaban cubiertas y las casas, invadidas. Un auténtica plaga.

El kudzu creó en el sur de los Estados Unidos un paisaje apocalíptico digno de una película de Steven Spielberg en la que la jungla hubiese invadido las ciudades. Por eso se le llama la «viña Godzilla». A pesar de todo, el kudzu es una bendición.

Un poderoso «disipador de borracheras»

En chino kudzu se traduce como «disipador de borracheras». El Dr. David Lee ya había observado que los chinos del norte bebían infusiones de kudzu para volver a estar sobrios y curar la resaca.

En 1991, el Dr. David Lee llevó a cabo un estudio en la Universidad de Shin-Yaget, en China. Analizó los efectos de una infusión de kudzu en ratas de laboratorio a las que se había hecho absorber alcohol. La coordinación motora de las ratas mejoró. Se mostraban menos intoxicadas [3].

Otros experimentos indicaron que los animales no parecían desarrollar habituación al kudzu [3]. El año siguiente, el Dr. David Lee sugirió a los investigadores del Centre Bowles de Estudios sobre el alcohol, en Carolina del Norte, un estudio complementario: observar si el kudzu ayudaba a desintoxicar a ratas que tenían tendencia genética a que les gustara el alcohol. Los investigadores se dieron cuenta de que administrar kudzu a ratas «alcohólicas» calmaba su tendencia a beber [4].

En 2011, tras unos resultados esperanzadores, investigadores de la Universidad de Harvard testaron la eficacia del kudzu en comparación con un placebo en un grupo de hombres y mujeres que bebían habitualmente entre 3 y 4 pintas de cerveza al día [5]. Y descubrieron dos fenómenos interesantes:

1. Los miembros que habían tomado kudzu tenían claramente menos ganas de tomar alcohol que los que tomaban el placebo;
2. Los miembros tratados con kudzu sentían con mayor rapidez los efectos del alcohol. En consecuencia, necesitaban beber menos para llegar a un grado de felicidad equivalente.

Desgraciadamente no existen muchos más estudios sobre la eficacia del kudzu para la desintoxicación.

Ello no quita que numerosos consumidores de kudzu hayan obtenido unos resultados muy convincentes. Hasta tal punto que el kudzu tiene reputación de curar todo tipo de adicciones: alcohol, tabaco, drogas, medicamentos, café, chocolate, trabajo, deporte [6]. El kudzu puede actuar en todos los casos de estrés agudo ligado a las adicciones y contribuir a la desintoxicación.

En Internet se encuentran numerosos testimonios, como el de Laurence, exfumadora [7]:
« Para mí el kudzu funciona mejor que los parches. Desde que lo utilizo solo he fumado dos cigarrillos, no he tenido ganas de volver. El sabor había cambiado».

A pesar de la ausencia de ensayos clínicos amplios, los investigadores han logrado entender por qué es eficaz el kudzu.

Los principios activos del kudzu

Las raíces del kudzu son ricas en isoflavonas de la familia de los flavonoides: contiene daidzeína, reconocida como antiinflamatorio y antimicrobiano. La daidzeína actúa contra el cáncer. La genisteína es un antileucémico [8]. Pero sobre todo, el kudzu constituye la única fuente de puerarina; de hecho, el nombre en latín del kudzu es pueraria [1].

Todas estas isoflavonas son antioxidantes que permiten reducir los daños relacionados con el alcohol.

Los estudios realizados mostraron que estas isoflavonas estimulan los «opioides» naturales del cerebro [9]. Actúan sobre los neurotransmisores, como la serotonina, el GABA y el glutamato [1].

Los factores habituales de adicción (alcohol, tabaco, drogas, azúcar...) aportan calma y bienestar. Esto sucede por un aumento de la producción de dopamina en el cerebro.

Las isoflavonas de kudzu permiten calmar la adicción. Intervienen en el sistema de la recompensa. Estimulan la producción de dopamina en sustitución de su «droga» favorita. Usted está así más relajado y su atención se desvía del objeto de adicción. Ya no siente la necesidad de tomar otra copa, otro cigarrillo o una enésima onza de chocolate.

El kudzu compensa el placer que proporciona la «droga» habitual y permite aliviar la adicción. Lo mejor es que el propio kudzu no es adictivo. Incluso diversos ensayos clínicos confirmaron su inocuidad [10]. Sin embargo, en caso de cáncer de mama se desaconsejan las isoflavonas.

Gracias al kudzu, puede sustituir progresivamente su «droga» y habituar lentamente al cerebro a recibir impulsos de dopamina menos importantes.

El kudzu contiene además saponósidos que previenen las lesiones celulares y protegen el hígado [9].

Más allá de las curas contra las adicciones, el kudzu tiene fama de ser eficaz contra el estrés en general. Relaja y facilita el sueño.

También se utiliza puntualmente para calmar la digestión y el tránsito intestinal [10].

Qué parte del kudzu se consume

La isoflavonas que contribuyen a desintoxicar de las adicciones se encuentran en la raíz del kudzu. Una vez molida, la raíz del kudzu puede introducirse en cápsulas para facilitar su absorción.
Esta carta es una adaptación autorizada de un artículo inicial publicado en santenatureinnovation.com.

---

Bibliografía:
[1] http://fr.wikipedia.org/wiki/Pueraria_montana
[2] http://maxshores.com/the-amazing-story-of-kudzu/
[3] Spivey, Angela. Sobering effects from the lowly kudzu. Endeavor Magazine (April, 1996) University of North Carolina at Chapel Hill.
[4] http://www2.potsdam.edu/alcohol/HealthIssues/1127332920.html#.U7UQ3bHHDe_
[5] D. Penetar et al., http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3074930/, Alcohol Clin Exp Res. Apr 2011; 35(4): 726–734,
[6] http://www.naturamundi.com/skin/frontend/natura/default/images/content/dependance.pdf
[7] http://rue89.nouvelobs.com/on-vous-enfume/2010/09/22/alcool-stress-et-tabac-le-kudzu-est-il-vraiment-un-remede-a-tout-166071
[8] http://arreter-de-fumer.umanlife.com/umanlife-le-kuzu-pour-arrter-le-tabac
[9] http://www.complements-alimentaires.co/kudzu/
[10] http://www.passeportsante.net/fr/Solutions/PlantesSupplements/Fiche.aspx?doc=kuzu